sábado, 3 de mayo de 2008

¨VELADA¨


la imagen se repite
nunca es igual
amigos son todos nadie en particular
el momento es siempre especial
sobre todo en la distancia
aunque ahora mismo no esta nada mal..
como un almacen lleno de latas de galletitas
de esas que ya no hay mas.
salvo resignificadas en algun lugar
las guardo
pero me las como antes de qe no sirvan mas.

Sobre los inventos - Matiu

Nací en un tiempo en el que la mayoría de
los jóvenes habían dejado de creer en Dios,
por la misma razón que sus mayores
habían creído en Él – sin saber por qué.

Fernando Pessoa,
Libro del desasosiego,
Fragmento 1


Foto: El mejor invento del mundo (hasta hace poco)

El mejor invento del mundo fue el del tipo al que se le ocurrió ordenar alfabéticamente el diccionario. Esto es lo que creía hasta hace poco. Luego me di cuenta de que a lo largo de la historia muchos inventos fueron severamente mal ponderados, ignorados arbitrariamente, y a pesar de ser útiles y significantes, hasta menospreciados por cotidianos.
Todos hablan de la rueda, ese invento mundialmente tan famoso, dicen que sin ella no tendríamos los autos, los aviones, los relojes suizos, la bandera de la India. Pero del escalón, ese genial elemento, ¿alguien dice algo? Nadie. Un invento así sí que requiere verdadero talento, una visión genuina de la utilidad, un deseo sincero por acercarse al Cielo llevado a la práctica. Sin él jamás hubiéramos sabido nada de la Capilla Sixtina, del Obelisco, de la banda Led Zeppelin, del tarro en el último estante, de los humanitarios carteles que advierten a los discapacitados, a los distraídos y a las personas de edad avanzada. Y sin embargo, así y todo, al escalón no lo reconoce nadie como eximio.
Otros grandes inventos han seguido también la misma suerte. El metegol, la técnica del baño María, la cajita de fósforos (y por qué no, también los fósforos), los pitutos, las muñequitas rusas esas que se meten una adentro de la otra. Todos ellos menospreciados, ignorados como inventos, y sus inventores, anónimos en el mar de la anonimia, fueron olvidados hasta por sus familiares más cercanos.
Los años son crueles sobre la memoria, quitan méritos y añaden perezas; por eso es índice de genialidad no sólo ser apreciado a través de la historia (como le ocurrió a Van Gogh, o a Cris Miró), sino también ser un paradigma inmediato entre los mismos contemporáneos.
El Che Guevara fue hace 40 años el último héroe a caballo, Maradona es nuestro último héroe popular. Los tiempos cambian, ya no hay personalidades de insuperable carisma y talento, de valentía cierta, de ingenio sutil. Esas mentes enormes que aún hoy admiramos con reverencia, las de Platón, Newton, Einstein, Benjamín Franklin -el más grande inventor del mundo, que como todos sabemos, inventó el barrilete-, esas mentes nos parecen cada día más lejanas e imposibles de comparar con las mentes actuales, aun con las más brillantes.
Es cierto que yo de ciencias no entiendo mucho. El otro día mencionaron delante mío a un tal Karl Popper y yo pensé que él era el tipo que había inventado esa droga que se consume en los boliches. No conozco demasiado. Pero sí entiendo esto: aquel científico que desee sobresalir entre sus colegas, e incluso entre sus congéneres, que desee verdaderamente hacer algo valioso por la humanidad; aquel científico que tenga la capacidad, y el ingenio, y la predisposición para habilitar la vía de conocimiento que solvente la dificultad que nos aqueja; aquel científico debe buscar su problema técnico entre los problemas más grandes de todos.
No alcanza con sugerirle al Sr. Philips que invente una lamparita que no se queme nunca. Lo necesario es retrotraerse hasta la inquietud máxima cuya eliminación jamás ha celebrado el ser humano.
La ciencia debe trabajar en pos de la humanidad, erradicar la ignorancia y el desaliño de nuestras erróneas creencias cotidianas. La ciencia debe investigar, mediante la exactitud de sus métodos y herramientas, la auténtica existencia de Dios. Al servicio de este experimento debe estar la ciencia. ¿Dios no existe? Que lo demuestre empíricamente. ¿Dios sí existe? Que lo demuestre empíricamente. Por lo pronto, yo creo que hay un 50 por ciento de probabilidades de que así sea. Y me parece que no es poco.

viernes, 2 de mayo de 2008

Cluster vacío

foto de
On a Motif from Hamamet
de Paul Klee
(1914)


Me tildé. No sé cómo pudo pasar. Cuándo. No sé. Pero me tildé. Hace como tres días que vengo tildado. Siempre supe que venía fallado, de fábrica, pero esto es distinto. Me dicen
¿no te cansás de hacer todo gratis por nada?
No, al contrario, vos esperás que te paguen, el reconocimiento, yo ya sé que no existe eso.
Entonces pienso: ¿por qué me tildo? Y claro, porque vengo un poco saturado. No me canso. Porque soy macho pero en cambio me tildo.
¿No?
¿No era que tenías que ser el súper macho que se las banca todas?
Y sí, yo me la banco pero me tildo de a ratos.
Y recién, cuando pensé que no podía estar más tildado que recién porque recién me tildé como nunca antes en todo mi vida previa se me apareció un dibujo en la cabeza... como unos cuadritos de colores. Algo así. No como el cuadro de Klee, parecido. Y me cansé de buscar. Me cansé de ver palabras, imágenes, videos. Me harté de buscar. Busco para no encontrar, me di cuenta. Si busco para encontrar la búsqueda no dura más de 1 minuto. Mis búsquedas no duran más de 1 minuto. Busco fácil encuentro fácil. Una fórmula que nunca falla.
Y recién, mirando la cara del pez del cuadro de Klee, la mandíbula de barco del cuadro de Klee, los dientes de loro clavándose una aceituna con forma de Klee del cuadro de Klee me tildé.
En sordina, tímido.
Me quedé sordo de información. No me entra nada más.
Y vuelvo a ver el cuadro de Klee.
Y veo olas de mar.
Entonces... se me vacía el cerebro y se reduce a un punto negro en fondo blanco.

jueves, 1 de mayo de 2008

Una bebida revolucionaria

Foto: Cata De León Belloc


Ginebra no
Cuba
Cuba libre
Cuba fuerte
Ron añejo
Cuba libre con “Tu Kola”
Cuba libre de Coca Cola
Cuba libre de Mc Donalds 
Cuba libre de dominio español 
Cuba libre de publicidad 
Cuba libre de shoppings 
Cuba libre de imperialismo 
Cuba libre de privatizaciones 
Cuba libre de industrialización 
Cuba libre de tecnologías modernas 
Cuba libre de Progreso 
Cuba libre de Razón 
Cuba libre de despolitización 
Ron cola hielo y limón 
Cuba libre 
Cuba 
Rumba, son y guaguancó 
¿Cuba libre?
o mojito con hierbabuena


Respondé SilVuPlé

fragmento de una foto de Marco Guoli



la pregunta tiene

dos partículas cuánticas

esperando

respuesta

en dos lugares al mismo tiempo




dos preguntas

en dos lugares

llenas de dos momentos



¿te gusto mucho?

¿poquitonada?



+

martes, 29 de abril de 2008

Postales de Guerra (el último de Tony Wilson)



Stalag Luft 1, Barth, Alemania. Septiembre 1944


Todas las mañanas hacía lo mismo. Daba vueltas, caminaba bordeando el perímetro, el cerco que nos rodeaba. Fue justamente una de esas mañanas que conocí a Johnny Kemp. Él estaba en la casilla de al lado. Llevaba ahí como prisionero de guerra más de cuatro años. Era de los más veteranos ahí. Cuatro años en un campo de concentración nazi. Estaba muy curtido. Sin embargo era uno de los más simpáticos, siempre optimista, contagiando buenas vibras- Un tipo maravilloso. Nos hicimos muy amigos y desde entonces nos encontramos cada mañana para caminar y dar una vueltas.
Hablábamos del barrio, nuestros hogares, nuestras familias. Él había perdido a sus padres, era hijo único, y era soltero.
*
Una mañana me habló de una chica de la que estaba locamente enamorado pero que nunca había conocido personalmente. Esta es la historia:-Seis meses después de haber sido tomado prisionero recibió su primera carta. Era de una chica, que para levantar el ánimo y el espíritu de un soldado voluntario, decidió escribirle como amiga. Algo muy común en tiempos de guerra. Ella le contó sobre su vida y sus días allá en sus pagos. Todo de una manera muy dulce y tierna. Johnny no tenía a nadie a quien escribirle así que le contestó agradeciéndole con la esperanza de volver a tener noticias de ella.
*
Meses después recibió una segunda carta. La contestó. Luego una tercera en la cual ella decía que esperaba mucho conocerlo ni bien concluyera la guerra.
Una mañana durante nuestra caminata me mostró las cartas. Era obvio que los dos estaban muy enamorados. Él solo pensaba en ella. Me preguntó mucho sobre la vida de casado, la vida en pareja, formar una familia y el amor. La chica había tocado su corazón. La hija de un contador de clase media de las afueras de Norfolk, una granja chica, con un caballo, varios perros, gatos, gallinas, tranquilidad, que parecía muy agradable. Me pidió que fuera su padrino de bodas si todo salía bien y la guerra terminaba y nos liberaban.
*
Una mañana salí a dar mi vuelta diaria, pero sin Johnny. No lo encontré en ninguna parte. Todas las casillas estaban cerradas porque había Inspección general. Así que con todos los prisioneros de guerra desparramados afuera
no era fácil ubicarlo. Después se armó un partido de fútbol y se volvieron a abrir las casitas. Fui a su cuarto. Estaba vacío pero encontré a Johhny tirado en la cama llorándose sus ojos afuera como un desdichado. Estaba destruido.
Finalmente pude contenerlo, recomponerlo un poco y llevarlo afuera a tomar aire.Caminamos. Fue la caminata más triste y desgarradora que experimenté en mi vida.
*
Aparentemente había salido temprano esa mañana y por una cosa o la otra había vuelto a su casilla. Se encontró con cuatro compañeros de la prisión
escribiendo sobre la mesa. Uno escribía en un sobre la dirección de Johnny.
POW (Prisoner of War) Nro …. Stalag, Luft 1. Otro falseaba una estampilla de correo. Dos discutían y escribían una carta a Querido Johnny.
*
Estos amigos prisioneros de guerra habían estado viviendo juntos por más de cuatro años. Habían empezado esto como una broma pero cuando Johnny contestó la carta decidieron seguir con el juego. Les divertía mucho escribirle, y les divertía más leer sus respuestas. No podían parar. Les daba algo para hacer, ocupar su tiempo, tener algo en que pensar y en que proyectar hacia adelante. Esto destrozó completamente a Johnny. De un hombre alegre, optimista, divertido, lleno de vida, fiel amigo, se convirtió en una sombra muy triste, en un hombre apagado.
Seguimos con nuestras caminatas hasta el final, y afortunadamente el avance de los Rusos y las noticias levantaron nuestros ánimos.
Nos encontramos una noche en Londres después de nuestro regreso. Juana (mi esposa) y yo, Johnny y una chica. Era un levante reciente, nada serio, nada importante. Johnny era otra persona, estaba muy cambiado. Murió poco después.

lunes, 28 de abril de 2008

en fin, desafinado

Afín: del latín "affinis" (vecino, colindante, contiguo) compuesta del prefijo ad- (proximidad, hacia) y finis (fin, borde). Afín: alguien que esta cerca de nuestros bordes.


Dale que va, que se me sube por la espalda y me baja hasta los calzoncillos, que si que no, que somos afines porque los días extraños siguen, los días extraños no terminaron y si algún día fui un mimo con las pelotas en el aire ahora soy el forzudo que sostiene algo más allá…
Nosotros podemos ser cada uno de los integrantes de un circo pero nunca seremos el circo, podemos ser el guiso pero nunca la papa hirviendo, podemos ser la novedad o el diario que envuelve los huevos, podemos ser la noche, la tarde o el día, pero nunca vamos a ser pan duro, picado fino. A lo sumo, tendremos nuestra muerte, será un violín desafinado diciéndole al finado ya no sos afín.

Dale que no va, que me moja la espalda y me sube hasta los calzoncillos, que no que si, que somos diferentes porque no conozco los días extraños, y estoy terminado. Bien terminado.