sábado, 10 de noviembre de 2007

La Misma Canción...

En mi cronograma disfruto de un sábado en el pacha
Que se llenó de “bichitos”
Que no me siguieron a mi del río
Saben de poesía y Vinieron siguiendo a edu herrera
Que me canta desde lo “Alto” de su voz,
Para festejar que hoy por fin…hice todo lo que tenía que hacer!
Pero así como su pegadizo estribillo se repite y se repite..
Yo repito y me repito..
Justo cuando creía que teNíalo todo yo bajo control …zAz!
…un descuido más.
Hoy compré la entrada para de polis,
(porque después de 20 años de esperar un recital , otra vez no se me iba a pasar!)
Esta vez no me pensaba olvidar!
Y costó..pero me levanté y me arranqué derechito a tiquetéc
Servicio puerta a puerta sin escalas via vaquita con un desconocido.
-“la mas barata señorita por favor…sí sí lo que sea..gracias”
-“Taxi, de acá a lo de mi inconcluso trabajo”…a terminarlo!
Y terniné!
6 meses tardé..pero terminé!
Que dia es??
entonces a festejar al pacha…
Que alegrón!
…-“Monito haceme otro ferné.. Qué hora es...ya es tarde para hacer ruido no…?
…EL EPÍGRAFE…noooooooo!!!!
y Otra vez…justo cuando pensaba que cada tarea había sido abordada
Me encontré coreando el mismo estribillo…(Bordado con mis hilos de paja)
…otra vez.

-“taxi…a casa…”
autorretrato.

Marosa

Cuando pienso en Marosa, pienso en una noche de verano. Pienso en una casa alejada, con todas las ventanas y las puertas abiertas, con las cortinas blancas meneándose por la brisa de la noche tibia. Pienso en un jardín tras la casa, con plantas verdes alumbradas por la luz pálida de la luna, que muestra todo pálido, el verde, el azul, las flores, los grillos. La casa tranquila duerme, respira tranquila, se arrulla sobre la hierba que la rodea. Las cortinas blancas se mecen en la noche tibia, y un resuello se aproxima desde lejos, una gota rara, casi perla, un aluvión de estrellas.
Cuando pienso en Marosa recuerdo la estatua ecuestre del jardín, con una guirnalda de rosas rojas, y tulipanes azules todos enredados, y cómo la luna los hace ver pálidos, como si estuviera comiéndose su color; y yo caminé por ese jardín, por ese día, por esa noche y con miedo, y cuando me perdí y llegó el Oscuro una mano amiga me llamó con voz de reina, con voz emocionada, y cuando me cobijó, dormí.
Creo que tuve un sueño y estaba Marosa.
Luego desperté y todavía era de noche. Pienso en lo que vi y me lo guardo, excepto la música fuerte que escuché después.
Cuando pienso en Marosa siempre recuerdo ese día, el día del poema que no se cerraba, el poema del taladro en mi pecho, en mi nuca, la caminata, el salto, todo.
Cuando pienso en Marosa siempre, siempre, sonrío y sueño.

viernes, 9 de noviembre de 2007

La gota en la frente

Foto:
Google images



Me despierto. Oigo el gric grac del reloj. Abro los ojos. Sí, estoy donde debería estar. Me quito las sábanas de algodón. Muevo los pies. Sí, estoy donde debería estar. Me siento en la cama. Siento los ojos. Me duelen los ojos. Tengo ojeras. Voy al baño. Camino lento, zigzaguente. Abro la puerta del baño. Me miro las manos, uñas sucias. Sí, estoy donde debería estar. La fría baldosa me da placer. Abro la canilla, la fría, y frente al espejo tomo aire por la nariz. Mucho. Sí, fumé mucho. Me miro al espejo y sonrío. Y no. El agua brilla a la luz de mis ojos. Meto la mano derecha, luego la izquierda. Un escalofrío me recorre la espalda. Me inclino y lo primero que mojo de mi cara es la frente. Suspiro; aliviado, por supuesto. Las dos manos, a la vez, bajan mojadas por mis mejillas. Tengo barba. Me la dejo. En el mentón agua nueva. Estiro un brazo y me sostengo mientras cierro los ojos porque vuelvo a tomar aire y en ese instante, que dura una inhalación, pienso que debería morirme pronto. Que debería ser una muerte simple. Sin escándalo. Sin misterio. Sin preguntas con doble sentido ni mujeres rotas. Que morirme es un plan recomendable. Abro los ojos. Miro la hoja de afeitar. Tomo aire. Enderezo la espalda sin quitarle la vista a mi muerte. Abro el agua caliente. Agarro la hoja de afeitar. Sí, estoy donde debería estar. Miro las uñas sucias y entonces busco algo con qué limpiarlas.
Después me afeito.

No sé cómo hacerte entender

Conchagrabado
Portada del poemario Abyecta )el asunto( de Eli Neira intervenido con conchagrabado 1/20






No sé como hacerte entender
(De Pop Life)

Mi cuerpo es un templo que aloja a un pequeño Dios
Es la nave y el cofre que guarda mi cerebro

En mi cuerpo siento la experiencia del amor y del hambre
También la sed

Un polvo conmigo es lo mejor que te va a pasar en la vida
Hijo de puta
Cabrón
Y
Este poema será el único hijo que te haré para tí

Asi que trátame como lo merezco
Ponte ese forro
Y cógeme como se coge a una mujer
No soy un travesti

No siento placer por el ano
Sólo dolor
No sé cómo hacerte entender eso

jueves, 8 de noviembre de 2007

servicio para la mujer argentina

















foto: Caro Mikalef


Me recomendaron este site: Don't date him, girl

Me dejó pensando en lo siguiente:
¿Y si
we date them justamente porque así no nos comprometemos?


Acá les tiro mi primer granito de arena
para el proyecto
Citate uno de éstos, nena
así después podés decir que los hombres
son
CASI todos iguales (iguales, lo que se dice iguales, no/acá van tres)

MARCELO:

Los marcelos se visten con camisa Lacoste y pantalones pinzados para salir. Y con un equipo de gimnasia adidas para estar en casa. Escuchan música en el home theatre que les ocupa casi todo el living. Se alimentan básicamente de matambrito de cerdo a la pizza y puré chef. Las salidas que proponen son: ir a ver pelis en su home theatre después de cenar matambrito con puré. (No, no me equivoqué repitiendo un renglón)
No hay mucho tema de conversación con un marcelo. Casi no leen, excepto por el diario Olé. Son graciosos, pero manejan un humor básico (por básico entiéndase: que siempre hace referencia a lo sexual, preferentemente a lo fálico). Son barrabravas de algún equipo de fútbol importante pero que últimamente no gana nunca. Su objetivo en la vida es la casa, el auto, la mujer (que nunca sos vos, obvio) y los hijos. Con ellos no podés expresar abiertamente lo que sentís, te miran como si les hablaras de trigonometría. Pero para lo que sí son buenos, no se requiere hablar mucho. Hay un vocabulario básico que todos manejamos para eso: partes del cuerpo, entra, sale y cómo-me-calienta.

IVÁN:

El outfit clásico de un iván es un jean marca Levi's, chomba o remera y zapatillas nike. Escuchan música de los 80s en equipos hifi o en ipods. No cocinan. Te llevan a cenar a los restaurantes más caros. Y si son los ivanes subespecie-no-casado, a cenar a la casa de padre, que es diplomático. Los ivanes son un parque de diversiones que no abre muy seguido. Tienen todo lo que un hombre tiene que tener, excepto disponibilidad. Ya porque están casados, ya porque son adictos a su trabajo o carrera profesional (ejemplo: tienen por objetivo la embajada argentina en Tazmania). Son en extremo cultos e ilustrados, pero les falta un poco de fisura. Con ellos no se puede hablar de sentimientos, porque te saltan con las siguientes advertencias: No te enamores de mí. No quisiera lastimarte. Me siento un egoísta disfrutándote. En la cama son un poco antisépticos, temen quedar impregnados de olores o perder el control y dejarte embarazada.

AGUSTÍN:

Un agustín tiene toooda la onda para vestirse. Lo que se dice, estilo propio. Esas camisas que están en el borde de ser algo muy cope o algo muy ridículo (según cómo las mires). Cocinan sano, te invitan a restós naturistas. Con ellos llegás a ver todas las obras de teatro under que hay en cartel. Escuchan música indie en donde sea: en la notebook, en el discman, en la radio (no sé cómo consiguen esas sintonías), en el hilo musical de su oficina. Con los agustines sí que se puede hablar de lo que sentís. De hecho, es casi lo único que hacés. Tienen su vulnerabilidad a flor de piel, entonces son sinceros y te dan espacio para la sinceridad. Ellos te expresan su incomprensible amor a cada rato, pero claro, de fondo está el fantasma de me da miedo amarte, soy un fóbico. Son espirituales, tienen mucha data para hablar de zen, por ejemplo. Para decir con teorías lo que no hacen: disfrutar del presente. Los agustines tienen un postgrado con mención de honor en los previos. Mucha franela, alta franela. Pero cogen poco. Poco y nada.


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A todos, hombres y mujeres, recomiendo ver
algo divertido, pero serio (no tan superficial como mi post):
Hombres, hombres, de Doris Dörrie

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miércoles, 7 de noviembre de 2007

no todo esta perdido


-Cero ochocientos skip, buenas noches...


-¡Socorro señorita, mi buzo se cayó al piso de un boliche, está todo manchado, no se que hacer...!!!!


-Tranquilícese señor...¿En que discoteca sucedió?


- ¡En Angels!


- No se preocupe, es una mancha fácil, compuesta básicamente por alcohol de mala calidad, tierra del rosedal y semen...tome nota por favor...

Fuerte

Si no fuese porque el oculista me dijo que los tenia puestos no le hubiese creído a mis ojos cuando te vi. Quede impresionado, sacado, enamorado, fue amor a primera, segunda y tercera vista. Fue un sueño que duro unos segundos, hasta que hablaste y me dijiste “hola”, “hola” “hola”, ese saludo tan vulgar que me hundió en un sueño todavía más profundo, porque mis sueños empiezan en lo vulgar y terminan mucho más abajo, ahí, ahí, donde se guardan las ladillas, donde hacemos billar y a nadie le importa. Porque a nadie le importa que vos tengas resortes por todo el cuerpo y yo apenas una rosca, una rosca potente que quiere que le hagas carambola una y otra vez.

martes, 6 de noviembre de 2007

los hombres no lloran

ª fede, hoy tenés que publicar, dale
º no puedo se me parte la cabeza
ª dale, probá, siempre está la escritura automática
º eso es de taller literario, no jodas, no voy a hacer un poema
sobre el mar... ademas no estoy enamorado
entonces no me salen poemas
ª no soy tu psicólogo, sólo te digo lo que tenés que hacer
º ...además ultimamente me estuve planteando
todo esta cuestión del "para qué", el "cómo", el "no seas ladri"
ª te voy a empezar a cobrar, callate y escribi algo
º pero... encima tengo que elegir una imagen, hay tántas
ª agarrá alguna que tengas a mano
º bueno a ver qué sale


envido al tuco

vos sos una dama
y yo no quiero jugar al ajedré


el reloj despertador suena agresivo
el mate es un amargo
el lujo menos soberbio sale verduras
el colectivero insulta a la madre
el taxista le quema el bocho a matafuegos
las guerras empiezan como un juego
al gato no lo mató la curiosidad
lo mató un borracho
los nervios los invita un jefe a la parrilla
el locutorio alberga sicarios
que matan por una moneda
los sordos cantan por un sueño
los rubios se hacen los rasta
ahora los blancos tambien rapean
los vecinos tambien compiten
el padre nuestro se peleó con sus hijos
todos pelan, todos pelean
celestino lucha con su dama
el tuco desconfía del pesto
ya nadie quiere jugar
los fideos tambien se pegan

un señor que salía de su casa volvió a abrir la puerta y gritó con
dolor...
-lo arruinaste todo roxana!!! dió un portazo y se fue a su trabajo.
seguramente su despertador también sonó agresivo.

lunes, 5 de noviembre de 2007



.......Tú moriste en un cuarto
en donde se congregaba toda la primavera
mirando un cesto con manzanas.
"He visto morir a un príncipe"
dijo uno de tus amigos......


Jorge Teillier


ahora escribo para cualquiera
que pueda darle un beso a la lluvia
y perderse en los trenes
con la chica de ojos de cuentos interminables
para cualquiera que se tome un fernet con amigos y funde nuevos bares
donde todos lleguen casualmente y despues nadie pueda irse
para cualquiera que dibuje en el cielo ovejas cantando
y pueda volver de los viajes
a recostarse en las mujeres que esperan junto a una escalera
para cualquiera que pueda caminar
las tardes azules de los nevados
y despues volver a casa, al amanecer, rodeado
por los pajaros furiosos del invierno y perros bandoleros
con una fiebre de mi bemoles
y lunas andrajosas en los bolsillos

domingo, 4 de noviembre de 2007

mostraste la hilacha



















venís a robarnos nuestro trabajo?












nuestros poemas?



vos no sos argentino



no te hagás






volá perro



eso dicen los cronopios






hoy es domingo lahe



te toca a vos



te voy a pegar en la cara



en la cara






con haille selassie n. hueso






no escapar









ay, me ahite